Me gusta cuando duermes porque sonríes,
el beso de Hipnos reposa en tus labios.
Me gusta despertarme y escuchar “Te amo”,
en un mundo sin ritmo
te haces música.
Me gusta lo tibio de tu cuerpo por las mañanas
y las tardes en pijamas cuando hacemos nada.
La vida, a veces, es lo simple.
Me gusta cuando abrazas hasta sofocarme,
mi fragilidad se hace corpórea entre tus brazos.
Hay lugares a los que se pertenece.
Me gusta cuando besas y sorbes mis lágrimas,
jugamos a ser Atlas y me ayudas con el mundo.
(aunque el peso nos hunda).
Son miles de cosas las que me gustan
y otras tantas que no.
Me disgustan las cursilerías que llevan estas líneas
también la mala imitación de Neruda.
No me gusta cuando callas ni cuando estás como ausente,
tampoco cuando se te extravía la mirada.
(Sé del irse de uno mismo)
Yo quiero ser tu
cable a tierra.
Me disculpo porque no recuerdo de cuál página bajé esta imagen. |
En este momento no he de gustarte, no sé bien qué decir y debo permanecer callado...
ResponderEliminarTE AMO!
Por éste y mil lustros más.