jueves, diciembre 31, 2009

59min: 11horas





El 2009 exhala su último aliento y hay mucho que quiero decirle, quejas incontables, pero hay tantas cosas que quiero agradecerte -ahora- viejo año…

365 días en los que viví: me perdí (aquella grandiosa perdida del 2 de enero), soñé, volé alto, dije “Te amo” (a pesar de tener las lágrimas en la garganta), tuve miedo, volví a enloquecer con mi ángel de la perdición, acampé, me enojé, lloré, viajé, tuve pérdidas, batallas ganadas, pero sobre todo, sonreí. Sí, no te niego viejito, que algunos días quise borrarte, quise borrarme, quise acabarnos; no te niego que fue duro verlos llorar, tener que pelear o vivir en plena incomprensión con ciertos hechos, no te niego que sufrí, pero aquí estoy, aquí estamos, de pie todos, para celebrar tu muerte y el nacimiento del que entra: Soñando, volando alto, con algo de miedo, con ganas de acampar, de viajar, de conocer; con ánimos y ganas de seguir con mi ángel de la perdición (mi amada Letras), de disfrutarla siempre; con ganas de llorar (susceptibilidad por el año nuevo), con ganas de enfrentarme al mundo –y ganarle-… escribiendo, sonriendo, Amando

Espero que estos 365 días que vienen nos colmen a todos de dicha, de alegría, de libros, de inspiración y ganas de escribir, de fuerzas para seguir viviendo (y disfrutándolo), de AMOR, de una que otra lágrima por tristeza (porque de las derrotas también se aprende) y de muchas lágrimas de alegría. Queridos lectores, que aunque sean pocos son fieles, espero de corazón que nos sigamos leyendo, comprendiendo, identificando.

¡Buenos días, bebé en pañales! A ver… ¿qué me traes ahora?

Te reto a que seas mejor. Nos reto a que seamos mejores.

¡FELIZ 2010!

martes, diciembre 29, 2009

Sueños: Italia




-                     Hola… ¿cómo estás?... disculpa que te despierte…sé que es muy temprano. Tuve un sueño hermoso…

La chica se despertó en una habitación desconocida, sobresaltada por un sueño que ahora no podía recordar. Su mano tanteo la cama en busca de un acompañante, pero se encontró con el tibio vacío de quién acababa de levantarse. Somnolienta se levantó del lecho, sus ojos reaccionaron violentamente ante la luz que entraba por el ventanal.
Él, en medio de la mañana, contempla El Vesuvio, tiene su pantalón de pijamas a cuadro y anda sin camisa; ella, toma su espalda, la acaricia y empieza a darle besos pequeños, a recorrerla con los dedos, cuando él voltea, ella sonríe, él va a abrazarla y ella se le escapa de los brazos, corriendo.
Entro al baño, conteniendo una risa tonta, me cepillo -no me había dado cuenta de que cargaba su suéter puesto, vuelvo a sonreír tontamente-. Al salir del baño, él sigue allí, observando, detallando, esperando a que el gran gigante dormido emita aunque sea un ronquido. Le digo:
-                     Estamos muy lejos para que nos alcance una erupción.
Me responde:
-                     Estamos demasiado jóvenes para que nos alcance una erupción…una erupción de él en particular… Además, ya tengo a mi propio impetuoso volcán  al lado… - la observa  y la besa.
 Y empieza todo de nuevo… Los besos profundos, las mordidas en los labios, las caricias con las manos, con la lengua, la ropa en el suelo…

La noche anterior a la anterior, ella había llegado a Nápoles. Pudiéramos decir que persiguiéndolo a él (pudiéramos decirlo si quisiéramos hacer de esto una historia romántica que a él le pareciera perfecta), pero no fue así; ella había llegado antes que él, porque la parada de él en Ginebra se alargo un poco más.

La noche en que llego, la ciudad tomó forma: ya no era una superposición de postales de lugares, escritores o comidas; se transformó en algo tangible con un olor tan particular y agradable, que recordaba a la sensación de oler papel glasé en un libro.  Mientras él estaba en el baño, ella intentaba recordar qué había soñado, qué era eso que tan de repente había hecho convulsionar a su inconsciente. Cuando él salió de ducharse, ella estaba sumida en un paseo onírico, intentando desenterrar imágenes que se pierden por la conciencia.
-                     Despierta- dice él, mientras su cabello escurre agua y algunas gotas caen sobre el rostro de la chica- … despierta… - y la última vocal se transforma en un suspiro que muere en los labios de ella.

Esa noche ella “salió a bailar”. Sonaba tan extraño para ella repetir esa frase: ir a bailar. Ella, que odia los lugares pequeños, las excesivas cantidades de gente y que tiene 2 pies izquierdos, iba a bailar.  Para muchos podría significar el fin del mundo si la escuchasen.
La chica “acomplejada” olvido su “identidad”: por una noche mandó su peso al demonio, relegó su estatura, el acné o sus despeinados cabellos. Salió del hotel con ropa aireada, algo maquillada –nunca con tacones-, y con ganas de comerse al mundo. Él la esperaba en el aeropuerto y esa noche bautizarían Nápoles a su estilo.
Mientras iba en el taxi recordó en flash backs los últimos 5 años, desde los días en que daba terror y sobresalto en el estómago pensar en plural, hasta estos, en donde ser 2 mosqueteros armando el destino (buscándolo, a lo griego) es lo único que cuenta; donde se bautizan lugares y, aunque algunos días se tengan ganas de dejar de existir, la sonrisa del otro, sus abrazos, su compañía, forman las brasas que alimentan el fuego de nuestros sueños. Pensaba en cómo le saltaría encima cuando lo viese, sólo por estar 24 horas en otro pedazo de tierra lejos de ella. Recordó el café en Verona (Da Gianni trattoria), las pequeñas callejuelas de la ciudad, los teatros y la lata de galletas apretada contra el pecho, mientras caminaban tomados de la mano; sonrió. A pesar del tiempo, no sólo los recuerdos la hacían sonreír, también eran las ganas de saltarle encima, de abrazarlo, de tocarle el rostro, de besarlo. A pesar del tiempo, él seguía siendo su principal razón para sonreír.
Esa noche, se hizo cuerpo. Dejó que la música penetrara en ella,  olvidó todas sus trabas y simplemente fue libre. Se movió, provocó, lo disfrutó. Bailó hasta cansarse, fue atrevida y no necesitó sustancia alguna, él y sus ganas (sus ganas de saciarse con él), eran suficientes.  Nápoles, la Nápoles que ella se había imaginado desde que quiso ir a Italia, les pertenecía…  








"Hola… ¿cómo estás?... disculpa que te despierte…Quería contarte un sueño...", pero no se atrevió. 
Quería contarte un sueño hermoso, pero no tengo el valor, no me atrevo a relatártelo por teléfono; no ha sido el primero y sé que no será el último…Me despierto todos los días con ganas de que sean reales, de despertar así; abro mis ojos en las madrugadas con ganas de llamarte y decirte lo que estaba soñando, pero mi voz no está acostumbrada a pronunciar finales felices. 

martes, diciembre 22, 2009

365 días (síndrome de abstinencia)

El aire pesa cuando no estás, me parece un tanto asfixiante vivir así.


No paro de imaginar el olor de tu piel, el color de tus ojos, la forma en la que tus brazos calan en mi cuerpo cuando me abrazas. No dejo de repetir tu voz, los gestos del día a día, esos que contemplo con placer. Cierro los ojos y aparece tú sonrisa, que me mata, me desnuda por completo. Son las frases, las acciones, los ademanes demasiado tuyos, que me hacen sonreír, sentir que vuelo.


No hay metáfora adecuada o verso improvisado o escrito sin sentido que pueda describir lo me haces sentir. No hay palabras.


Sueño con recorrer tu espalda y tu abdomen con mis dedos, y mientras lo hago siento como bullen dentro de mí las ganas de ti. Cuando tu cabello se escapa de mis dedos y el aire contenido por un beso se transforma en gemido… despierto. Enloquecida por tu ausencia.


No me sació de ti. Eres una droga que corre por mis venas, los pensamientos presentes que se hilan en mi mente. Eres cada latido de mi corazón.


Nunca antes dije TE AMO con tanta seguridad, nunca antes dije TE AMO sabiendo lo que es el amor, esta clase de amor (pasional, incontrolable, auténtico). Nunca volveré a decir TE AMO sin pensar –aunque sea sólo por un segundo- en ti.

miércoles, noviembre 18, 2009

Llueven plumas

No tengo mucha información acerca de los hechos que sucedieron esa noche. No hay nada claro, graficado, especificado por escrito, que pueda hacer que todo tenga una respuesta, un motivo. Recuerdo la mirada “perdida” del detective, absorta en el charco de sangre. Me dijo, “se suicidio una noche de invierno…”, y parecía que ese detalle le tenía dando vueltas en su cabeza, entre miles de pensamientos. “¿Y eso qué tiene que ver?, pregunté. “No lo sé, los suicidas son alegremente tristes en invierno, es una especie de ‘conciencia de miseria compartida’: todos estamos tristes y congelados, y ellos, al fin, se sienten –nos sienten- parte de algo ¿entiende?. Y yo que voy a saber, pensé. Asentí sólo por hacer algo.


El cuerpo de la chica había sido levantado, ahora sólo quedaba la sangre, dentro de un par de días ésta desaparecería por completo – junto con la noticia de su muerte-. Algunas noches me pregunto por qué lo hizo, si lanzarse de un piso 13 tenía alguna significación para ella; me pregunto si sintió como el aire le aplastaba los pulmones y si se asfixió antes de llegar al piso. Pobre chica. No era hermosa, no para muchos, quizás tampoco para mí: su cara le hacía aparentar 6 años más de los que tenía, su cuerpo no era el más agraciado, sin embargo… había algo hermoso mientras caía, quizás el velo de la muerte cubrió todo de flores para ella, quizás hizo que todo luciera con belleza pura, o con pura belleza, en fin… creo son expresiones que usaría un amante morboso de la muerte y no creo que yo lo sea. Aun así, ante todo el panorama, me sigue haciendo resonancia la frase del detective “se suicido una noche de invierno…”; ¿qué tan desesperado, solitario, desamparado o terriblemente mal, hay que sentirse para suicidarse en una noche que amenaza fuertemente con llover?


Con la pregunta anterior fue que empecé a buscar luces para revelar este raro acertijo, pero no encontré nada. Cuando fui a su apartamento, la conserje me dijo que vivía sola, que acababa de mudarse, que le parecía una chica extraña (“en su sala no había ni un sólo mueble, pero tenía una biblioteca repleta de libros…”), me pregunto que le habrá parecido a la chica su indiscreta conserje y en dónde estarán esos libros ahora. Sus vecinos me contaron que tenía novio, que sonreía mucho cuando estaba con él (“siempre agarraditos de la mano, amor joven, usted comprenderá…”), que era amable y que, como todos, tenía sus malos días. No quise buscar a su familia, sé que debía verse mal el hecho de que un perfecto desconocido fuese a preguntar por una perfecta (des)conocida, a investigar sobre su vida y las causas que la condujeron a la muerte. Casualmente, encontré al detective en una pesquisa en un centro comercial; él no me reconoció, pero luego de citarle el caso y su enigmática frase, me informó que ella ya había tenido intentos frustrados de suicidio (“su madre me dijo que se llamaba a sí misma ‘cobarde’”), y que había encontrado entre sus archivos muchos escritos acerca de la muerte y el amor, junto con una peculiar pegunta dibujada en una hoja de cuaderno.


-¿qué era?- pregunté con desdén, aunque la curiosidad galopaba en mis sentidos.
- Una pregunta de enamorados. Creo que cuando llegaba la noche, y todo se callaba, ella se preguntaba si estaba bien ser tan feliz, si todo era un añadido, si estaba bien la sensación de indispensabilidad o si perdería lo que más amaba…hablaba y escribía mucho del amor, de la vida….- y de nuevo su mirada se perdió en el vacío.
- ¿quién era su novio?- no quería volver a asentir solo por hacer algo.
- ¡¿Y es qué acaso tu eres policía, periodista o qué?!¡¿Para qué andas interrogando acerca de un suicidio que tuviste la oportunidad de ver?! – dijo ofuscado.
- entiendo, entiendo. Pero me parece sospechoso que alguien tan joven, con tanta vida por delante y que fuese feliz, haya decidido, una noche hermosa, aventarse al vacío…
- ¡¡Qué hermosa va a estar siendo una noche que amenazaba con un diluvio!!... Además, eso es lo que hace la gente loca…


Y nuestra conversación quedo allí. A mis manos ha llegado el peculiar dibujo. Todavía sigo sin entender qué paso.


Pensé que se lo había demostrado- entiendo que no lo aceptase por completo (me gustaba que no lo hiciera)-, pero creo que le hice entender que sería para siempre: que ella, con mi presencia todos los días y mi esfuerzo constante por salvar su (nuestro) mundo, terminaría por creerlo y aceptarlo. Vi su cuerpo caer, la fragilidad de su alma se expuso desnuda ante mis ojos y nunca voy a siquiera intentar comprender por qué lo hizo.


Desde entonces no ha dejado de amenazar con llover, yo sigo parado en el mismo sitio, viendo como llueven plumas, como mi ángel se deshace en el vacío.





-          … eso es lo que hace la gente loca…

domingo, noviembre 08, 2009

Happy Birthday!

Hoy vengo aquí con un par de premisas que hace un año serian inadmisibles: vengo a hablar de mí y a decir que la realidad parece ser tan maravillosa (quizás hay días en los que es hasta mejor) como los sueños. Sí, el 2 de noviembre del 2008, lo que acabo de decir me parecería una total y absurda locura, pero de ese material está hecha la vida: de paradoja y locura, de vueltas que –como en una montaña rusa- son capaces de dejarte mareado, con tu  “manifiesto de absurdo” volando por los aires.

“vengo a hablar de mí” y sonrío ante la frase. ¿Es que, acaso, no he estado haciendo eso durante todo este año? Historias sobre nada nace con la idea fija de hablar de relatos, fantasías, sueños, historias sobre nada, intrascendencias, de una forma “anónima”; este espacio pretendía ser utilizado como una válvula de escape, en donde la vida real fuese maquillada y la identidad disimulada. Es evidente que ese norte se ha perdido, puesto que creo que nadie puede crear un espacio donde solo se hable de fantasías, sueños (que parecen) imposibles de realizar, porque hablar de estas historias e intentar hacer literatura con ellas, es hablar de la vida: no podemos separar las nociones de “literatura” de las nociones de “vida” (o como diría Rafael Cadenas, de “realidad”) e “imaginación”: parece ser que Vida-Imaginación-Literatura, forman una triada universal que permea todo lo humano y por ende, tiende a transgredir la idea de “anonimato” en el individuo. Hoy quiero reafirmar la idea de que tiendo a utilizar mis palabras como un reflejo de mi ser y que durante todo este tiempo, cada uno de esos escritos eran/son migajitas que forman un corazón que siente demasiado y un cerebro que…también siente demasiado. 

Podría empezar a hacer un análisis de crecimiento o un gráfico de estados anímicos de todos estos 12 meses, pero sólo me remitiré a decir que estoy feliz: me alegra que este espacio se mantenga tan auténtico como cuando empezó y aunque no me enorgullezca de casi ninguno de mis escritos, sé que siempre los tendré para recordarme por todo lo que pase, por todo lo que pasaré… ¡Feliz cumpleaños Historias sobre nada! Espero que esta nadería -y que la musa que la hace presente (razón por la cual huí a este lugar)- se mantenga por mucho tiempo, siendo testigo de ese corazón y cerebro, a los que les gusta vivir en medio de ensoñaciones.

Dije que no haría un análisis de crecimiento, pero se me vino a la mente la película “Sweet november” (Sí, me gusto esa película: desde recordar que la primera vez que la vi me quede dormida, pasando por la inexpresividad de Keanu Reaves, hasta la “linda” escena en el puente) y, debido a que, tengo la manía enfermiza de ser precisa con las fechas y a que el nombre de la película me remite a estas fechas, quisiera colocar una lista de “eventos” que hicieron que estas historias se hiciesen cuerpo:

            Dulce noviembre:

- 1ero de noviembre del 2008: toque de “Los mentas” en la Plaza “La Castellana”, aparición contundente de Jota, la esencia que necesitaba para terminar el cuento. Desespero ante la sensación de no volver a verle (Stand by me: Blog MySpace | de Tontamente yo :)
- 2 de noviembre del 2008: en busca de desprenderme de lo que sentía, abrí el blogspot. A ver si Jota salía de mi mente y dejaba de distraerme.
 - 3 de noviembre 2008: cumpleaños de mi abuelita :$ (¡dije que sería algo muy personal!)
 - Del 10 al 13 de noviembre del 2008: tanda de primeros parciales
- 11 de noviembre del 2008: todos los ejemplos en la materia “morfosintaxis del español”, utilizaban el nombre Juan como ejemplo ¬¬ Se estaba haciendo intolerable…
 - 12 de noviembre del 2008: esto: http://bit.ly/3NQ46X
- 13 de noviembre del 2008: tenía que entregar un ensayo de “El Quijote” y en mitad de camino de mi casa a la uni, decidí que me iba a arriesgar y que me importaba un bledo lo que pasase de ahora en adelante.
- 15 de noviembre del 2008: la primera mejor cita de mi vida :$ Una susy, anime, música y las ganas de no irme nunca.
- 18 de noviembre del 2008: estoy perdiendo, a pesar de decidir que iba a arriesgarme, tengo miedo y la invasión que lleva tu nombre agobia mis pensamientos, altera mi corazón.
- 20 de noviembre del 2008: lluvia torrencial. Frustración y aceptación casi oficial de lo que quería que sucediera. Nacimiento de Only happy when it rains, en una hoja de mi cuaderno de morfo...
- 21 de noviembre del 2008: un día que estuvo por no suceder. Olvide mi discurso moralista. El chocolate, su compañía, las ganas por besarle que arremeten contra mis sentidos…Espejo siniestros y el chalequeo de mis amigos...
- 22 de noviembre del 2008: “¿Qué estamos haciendo?” Y una brillante desaparición, a punto de ser definitiva…
 - 24 de noviembre del 2008: Toda la angustia de los últimos tres días se resume en http://bit.ly/2VhvHf
- 25 de noviembre del 2008: ciertos matices de mi discurso moralista (y sin muchas ganas), me contaron el cap. de Supernatural que no vi y recorrimos subways. Pena, demasiada pena, al preguntarme “¿Qué paso con tu blog? Que no pude leer bien”


    Tuve un muy dulce noviembre y voy por el mismo camino este año ♥☺
    ¡Muchas gracias a la gente que lee historias (y sobretodo, eternamente gracias a los que comentan) y muchas gracias a historias por dejar que yo le de forma!

    jueves, octubre 22, 2009

    Ensoñaciones confesas de un nocturno







    Me acosté con una enorme sonrisa en el rostro; porque con nosotros hasta los silencios son cómodos y las largas conversaciones telefónicas son una fascinación que solo podrá ser reemplazada por conversaciones de frente, donde los besos se usen para acallar al otro y el roce disimulado entre las manos mientras se habla sea algo tangible. Sí, me acosté con una gran sonrisa en el rostro: no sé cuánto tiempo sea así de perfecto, si será lo suficientemente largo (para siempre) o si sólo estoy viviendo una realidad soñada que al amanecer se esfumará por completo, no lo sé, algunas veces me da miedo, me desespero ante la imagen desapareciendo; desde el primer día brotan lagrimas si pienso que me tengo que alejar…no puedo, no quiero, no quiero. Pero está noche me dormí, no sólo con la sensación de que las cosas serán cada vez mejores sino con la idea fija de que lo primero que mis ojos verán al amanecer serán sus ojos cerrados, su presencia que me mata, que me enloquece, que me llena.




    Me acerque demasiado, la tv estaba encendida y sus ojos habían estado fijos en ella durante los últimos 2 minutos, sé que tenía que controlarme, que nos interesaba demasiado lo que veíamos y, aún así, el deseo era algo incontrolable. La forma de sus labios, el color, el hálito que se escapaba ante mi cercanía -es ese tipo de “prueba de fuego” ante la que siempre caemos – y mi mirada que pasaba de sus ojos a sus labios y de sus labios a sus ojos, buscando el arrebato de locura, deseando con desesperación un beso, anhelando con fiereza morder su labio inferior y sentir como nos robamos el aliento… Así que lo hice: maté los 10 centímetros que nos separaban y lo bese.


    Jugué con su cabello entre mis dedos, sentí latir su corazón contra mi pecho, el roce de sus caricias hacía palpitar cada una de las capas de mi piel y el olor de su cuello…el olor delirante de su cuello, me trastornaba: mis labios buscaron contacto con esa parte de su cuerpo, mis dientes se hincaron en él, mi lengua lo recorrió, saboreándolo; cual vampiro sediento, mi cuerpo gritaba por el suyo y mi cerebro (mintiéndome, quizás), me repetía que no solamente era una cuestión de hormonas, de satisfacción y por más ridículo que suene, es la sensación de complementación, el reclamo de esa parte que algún dios caprichoso arranco de mí. Poco a poco no quedo ninguna pequeña parte de su piel que no fuese besada, tocada, acariciada, reconocida por mis sentidos. La exquisitez de sus hombros blancos, el contacto entre mis dedos y ellos, entre mi lengua y esa parte de su cuerpo, la sensación de sus besos en mi piel, la forma en que sus manos recorren mi ser…


    … Quizás sea demasiado físico. Sé que es difícil diferenciar algo emocional en un evento tan animal, pero la sensación de desnudez del alma -con las luces prendidas- viene precedida por la desnudez física: cuando ya no temes quitártelo todo y das lo mejor de ti, con ropa o sin ella, cuando te atreves a decir “déjame tomar aire” mientras lloras (y la otra persona lo sabe) al otro lado del teléfono o cuando en un abrazo piensas under your arms feels like home, simplemente lo sabes. SABES, SIENTES, QUIERES Y PIENSAS que lo que más te gustaría en el mundo sería acostarte a su lado y despertarte junto a él.




    Esta mañana me desperté con una enorme sonrisa en el rostro. Había soñado con él, lo había visto sonreír antes de que se quedase profundamente dormido, conmigo entre sus brazos.

    miércoles, octubre 07, 2009

    Hoy, alguien, algo, quizás, estar...


    Hoy llovió, el mundo quiso acabarse en media hora, un árbol se cayó en Caracas (o muchos árboles, no lo sé) y hubo un temblor en México y Kirguistán (y, supongo, que en otros países); en algún lugar del mundo un extranjero lloraba por irse a casa y en otro lugar un nativo lloraba por sentirse preso en su propia tierra; quizás en el piso de abajo reinaba la soledad en algún apartamento o en el piso de arriba alguien reía a carcajadas, disfrutando la compañía; alguien pudo escuchar a Fito Páez porque se sentía triste o a NIN porque estaba feliz, o viceversa , o ninguna de las anteriores, o todas juntas; quizás, sólo quizás, alguien quiso estirar un abrazo de dos minutos porque siente que hay algo en el aire que le está aplastando; en alguna sala vacía ese “algo” se transforma en miedo y destruye pensamientos, invadiendo la garganta con un nudo que no puede desatarse; en alguna media noche que acaba de empezar, alguien teme a sus propios pensamientos, a la idea fija de no ser suficiente; quizás alguien llora en un lugar donde todos duermen porque odia sentirse así: incomprensible, quizás la garganta logre respirar, el nudo parece ablandarse… En algún lugar del universo alguien se va a dormir, para encontrarse –en sueños- con quién le hace sonreír (volar), para sentir que vale la pena estar vivo, en este pedazo de tierra, triste o feliz, o ninguna de las anteriores, o todas… simplemente estar. Ayer llovió, el cielo aún permanece nublado.

    lunes, octubre 05, 2009

    Tengo sueño, la pila de mi laptop esta muriendo



    ♪ No llores niña dulce, prometo quedarme para siempre.
    Niña triste e insegura, frágil como flor en el desierto,
    no temas a la luz, mis ojos vienen cargados de ella.
    Niña dulce, niña triste, te acostumbraste a la oscuridad,
    déjame hacerte ver, con una sonrisa, lo mucho que puedes brillar ♫





    Adicción, sensación de indispensabilidad, algo no nombrado, ese algo que va más allá del amor y del nimio deseo. Ese "algo" para lo que la frase "Te amo" se quedó corta.


    Quiero hacerme imprescindible, meterme en tu piel cual droga ilegal, saciarme de tus besos (¿acaso es eso posible?), llenarte de caricias, robarte el aliento, regalarte alegrías...


    ¡Condenada estrella!¡despampanante sonrisa!
    Brillas en las penumbras y con una mirada puedes acabar con la oscuridad, con una frase puedes borrar las lágrimas.
    ¿Fue el destino o el error de un milagro lo que te ha traído aquí?


    Por razones algo inexplicables, camino con pasos torpes a tu lado, hacia un Destino que pareciera pertenecerNOS...


    Hay días en los que tengo miedo (creo que nunca voy a dejar de tenerlo), miedo a extraviarme, a dejar de caminar a tu lado; estoy tan acostumbrada a que la gente se marche (y aún así, a pesar de la costumbre, todavía duele) y tengo el corazón tan lleno de curitas, que amarte tanto pega hasta en mis huesos, en mi juicio...en todo...


    Estoy cómoda a tu lado, enloquecer así no se me habría hecho tan placentero sin tu presencia y es tan fácil querer esto para siempre, pero lo que se hace costumbre deja marca en el alma y perderlo hará que todo en ella se fracturé, se resquebraje.


    No lo hagas, no lo hagas. No arranques tu alma de la mía. Nunca más va a acostumbrarse a estar sola.

    jueves, septiembre 10, 2009

    Test del blog 'Letras y Escenas', robado a Tenebra Letras

    Debido a la inapetencia por la escritura y porque odio que lo primero que aparezca cuando abro esto sea algo de política, voy a robarle a mis Historias sobre nada el espacio para un test; 1. porque estoy aburrida, 2. porque los test me entretienen, 3. porque las respuestas también son historias sobre nada xD


    REGLAS: 

    1- Responder a las preguntas en tu blog. 

    2- Cambiar 1 pregunta que no te guste por otra inventada por ti (las puedo responder todas, no tengo ningún problema con ninguna) 

    3- Añadir 1 pregunta creada por ti y añadirla a la lista de preguntas. 
    4- Pasar el Test a otras 8 personas. (Bah! que lo "postee" el que quiera) 
    Ready: Go! 
    1· Un lugar para relajarte: El Ávila al anochecer (Ávila mágica o estar acampando), el mar cuando no hay mucha gente alrededor o metida en él (entiéndase una playa solitaria), la Colonia Tovar mmm creo que cualquier lugar en donde haya naturaleza y este solitario
    2· ¿Te echas la siesta? Sí, cada vez que puedo, por motivos diferentes...
    3· ¿Quién ha sido la última persona a la que has abrazado? ¿Abrazar de verdad? a Mr. Cosa el martes xP
    4· ¿Te gusta el deporte de riesgo? Depende, si se trata de volar me arriesgo :) 
    5· ¿Cuál es la última cosa que te has comprado? Galletassssssss y un lipton de durazno :P 
    6· ¿Te gusta escuchar música cuando entras en otros blogs o apagas el reproductor nada + abrir la página? Generalmente apago la música, reviso la lista y escucho lo que me llame la atención, claro esta si no estoy escuchando algo yop. 
    7· ¿Cuál es tu estación del año favorita? En Venezuela, cuando huele a tierra mojada, el día esta nublado o lluvioso :) Si viviera en otro país -uno de cuatro estaciones- seria el Invierno y el Otoño :D
    8· Di algo de la persona que te envió este meme: Tenebra te robe esto, disculpa, me gusta tu forma sincera y espontanea de escribir :)
    9. Si pudieras tener una casa totalmente amueblada y gratis en cualquier parte del mundo, ¿dónde te gustaría que estuviera? En una montaña con todas las comodidades del mundo y por alguna razón pensé en Escocia :s
    10· ¿Cuál es tu lugar favorito de vacaciones? Mérida, la Gran Sabana, cualquier lugar mientras este con el chico que hace de mis días algo maravilloso
    11· ¿Cómo tomas el café? Capuccino italiano ¡Aguante Miga'S!
    12· ¿De qué te gustaría librarte? Del miedo, de la gente envidiosa, de mucha gente en general...
    13· ¿Qué querías ser de pequeñ@? Astrónoma y escribir algo que me hiciese famosa 
    14· ¿Qué estas leyendo ahora mismo? "Un amor de Swann" de Marcel Proust 
    15· ¿Cuál es tu marca favorita de Jeans? Ni idea de cuantas marcas de jeans existen :S me da lo mismo xD
    16· ¿Cuántas horas puedes pasarte al día sentado delante del ordenador? Infinitas y cada vez me hago más y más adicta :$
    17· ¿Vivirías tu vida de otra manera a como la vives ahora? Algunos días quisiera cambiarla por completo, otros agradezco mucho las decisiones que me trajeron hasta aquí, así que...quizás sí, si la viviría diferente para luego arrepentirme (Circulo vicioso) xD
    18· ¿Volverías a crear el blog? Probablemente, si sigue la incapacidad para escribir es seguro que lo cierre... 
    19· ¿Qué crees que hay después de la muerte? Contradicción... todos los días pienso que no debería de haber nada, que los padecimientos acaban cuando se acaba la vida
    20· ¿Cuál es la combinación de colores que más usas? negro, blanco, morado, gris, azul...mmm nunca estoy pendiente de que combino -.-
    21· ¿Eres feliz? Depende del día, hoy sí, soy feliz :)
    22· Si tuvieras que reencarnarte, ¿en qué animal lo harías? mmm no lo había pensando...un  tigre blanco o un delfín o...un elefante!!!
    23· ¿Un sueño? Sentir que de los sueños no se despierta y seguir sintiéndome en las nubes
    24· ¿Qué personaje cinematográfico te gustaría interpretar? Sofía en el "Mundo de Sofía" sería divertido xD pero la verdad no lo sé
    25· ¿Qué cosa haces (a sabiendas de que es mala) que no puedes parar de hacer? Soñar dormida o despierta, ser desordenada...ser idealista...
    26· Si pudieras elegir en que época vivir, ¿cuál sería? Podría ser el siglo XVI 
    27. ¿Qué te provoca miedo? EL FRACASO, La pérdida, la infidelidad, la traición, la decepción, el no ser suficiente, el no ser en lo absoluto...ahh y las cosas babosas, las ratas y de vez en cuando los monstruos debajo de mi cama xD
    28. Si pudieras definir tu vida en una canción, ¿cuál sería? por alguna razón pienso en We might fall de Ryan Star pero la verdad no lo sé, no lo había pensado 
    29. ¿Te gustaría casarte y tener hijos? Mmm acabo de encontrar una pregunta que cambiaría :P Sí, creo que me gustaría casarme, no, no creo que alguien como yo deba reproducirse
    30. ¿Alguna vez has volado en sueños? Sí ¿cuenta caer de un edificio, verdad? 
    31. Pregunta que he añadido: ¿Por qué te gusta la luna? Tiene algo fascinante, es cómplice de muchas fantasías, es hermosa y soy lunática jajajaja quizás por eso
    32. Mi pregunta añadida ¿Qué estas pensando en este mismo instante?  En lo mucho que me gustaría estar teniendo una plática sobre el estudio y el cuarto de un futuro lugar, en persona :D

    viernes, agosto 14, 2009

    Yo no me calle

    Hoy salió mi gen político -porque creo que todos tenemos uno- y a pesar de que no quiera contaminar mis historias sobre nada con el mundo políticamente corrupto y asqueroso, cuando lees algo como esto: http://planetaurbe.com/ser-joven-es-ilegal-art-50-de-proyecto-de-ley-de-educacion/ , te dan ganas de hablar, de decir algo, de decir YO NO ME CALLE. Así que, aquí está mi comentario, un poco divagante e inconcluso pero ¡demonios, a quién le importa?! Al final del día esto sólo lo habrán leído máximo dos personas:

    No sé en qué momento decidí dejar de leer periódicos y ver noticias en la tv, el país se está pudriendo y eso lo vivo a diario, no quiero revolcarme en la miseria a través de los medios, quizás por ello no tengo suficiente conocimiento para saber que está pasando. Pero hay que detenerse cuando encuentras algo bien escrito, cuando sabes que hasta si la persona que está más encerrado en su burbuja de cristal se está quejando es porque ya no solo afecta a los adultos que sacan cuentas y a los políticos que viven de robarse mutuamente, ya no solo está descompuesto, cayéndose a pedazos, el país que conozco –y que la mayoría de las veces me desagrada- está a punto de dejar de existir…todo ¿para qué o por qué?
    Para qué: para transformar lo que quede – que de seguro no puede llamarse país- en el imperio de uno solo y de la gente que esté dispuesta –y hay mucha que lo está- a calarse sus caprichos, porque hay tantas cosas que ese señor ha hecho, tanto que ha destruido, que perder lo único que le ha causado gloria (dinero, poder, fama) acabaría con su vida y cuanto alguien esta desesperado toma medidas desesperadas, para mantener “al pueblo” – los seres humanos que habitan este pedazo de tierra, sea por decisión propia o no- ignorante, porque mientras más ignorancia tenga el populacho, más poder para los gobernantes.
    Por qué: porque la tecnología transmite conocimientos, porque existen esperanzas si aun puedes expresarte libremente, porque la universidad se trata de universalidad y la “buena educación” – en este país dejo de ser “buena” y ahora está por dejar de ser educación- nos hace ver que lo que se nos hace no es lo correcto y no esta para nada bien. Porque un megalómano inteligente –sí, admitamos que el simio es inteligente ya que sino alguien, quien sea, lo hubiese bajado del poder- y su coprófago gabinete tienen miedo y al mismo tiempo se alimentan de él; porque saben que en algún punto todos se cansarán – hasta los que reciben comida a bajos precios juntada con ese particular sentimiento patriótico (básicamente incorrecto) que antes desconocían y que tan bien les hace sentir-, porque los medios dejaran de ocultar y hasta el más aislado querrá salir a defender su derecho de aislamiento, porque es más fácil silenciarlo todo que dar explicaciones.

    La rebeldía, el ser contestatarios y no querer seguir ordenes no es algo que sólo involucre a la juventud, pero si es algo que crece y se intensifica cuando se es joven, quizás porque cuando eres mayor estas cansado de luchar contra el sistema, pero ¿cómo cansarse de algo que no has hecho? No digo que salgamos a incendiarlo todo –por más de que sienta ese deseo galopar en mis venas y tenga conocimiento de que galopa en otras- pero sí estoy de acuerdo de que nos cansemos, de que cuando seamos viejos barrigones y cincuentones podamos decir con gusto y vanidad: YO NO ME CALLE.

    Porque tenemos el derecho a decir lo que queramos, hablar sobre lo que queramos, quejarnos de quién sea o de lo que sea, discutir las políticas que regirán nuestra estadía en este pedazo de tierra – en NUESTRO país- y mostrarnos en desacuerdo (o acuerdo) con ellas; porque ser contestatarios, insurrectos, incorrectos, rebeldes, imperfectos, DIFERENTES, jóvenes o no, es algo que un gobierno NO TIENE PORQUE DECIDIR, ni lo hará jamás, porque SOMOS LIBRES y ahora más que nunca hay que gritar, patalear y defender esa libertad. No es ilegal ser nada de lo aquí mencionado, es simplemente humano, de individuos, de gente con deberes y derechos...Y...cállame si puedes...

    jueves, julio 30, 2009

    Desvarío entreverado

    Quizás es un poco de ira lo que se esconde tras estas líneas, más bien diría que es algo de ansiedad mezclado con nostalgia, un poco de ganas de destruir el mundo y empezar a million miles away, no lo sé, quizás es un poco de todo ligado con nada.

    Si tuviera que acabar con todo, traer un apoteósico apocalipsis, creo que empezaría derrumbando iglesias (sí, lo sé, destruiría obras arquitectónicas muy hermosas), lo haría porque todo el meollo de la destrucción se trata de culpar a alguien y las instituciones son lo primero que se me viene a la mente: arrivederci basílica de San Pedro, adieu Catedral de Notre-Dame, hasta nunca Iglesia de San Martín de Tours ¡púdranse tú y tu ausencia divina! … Empiezo con las iglesias porque me molesta que Dios haya abandonado el edificio, que oremos y supliquemos a la imagen del que, al parecer, no esta, y que sea tan difícil desprendernos de su (in)existencia. Creo que ya mencione la frustración en la lista de ingredientes, creo que culpo a quien no puedo demandar porque siempre tengo que tener a alguien a quién culpar.

    Lo que me molesta de esta noche es que siento que no puedo hacer nada para cambiar una situación, siento que falto a mi promesa nunca expresada de “no permitir que (l@) hieran”… Es terrible pensar que el mundo se te escabulle entre los dedos y es horrible sentir las lágrimas en la garganta con el solo pensamiento de que alguien que amas ya se haya marchado cuando despiertes en la mañana. Es un poco complicado esto de ser humano. Es ira, remordimiento, culpa, sueños, amor, sentimientos ajenos adquiridos con el tiempo, ya dije que era complicado esto de ser humano.

    Quizás esta sensación medio amarga solo sea porque pienso en lo efímero que puede ser todo, quizás por el condenado pensamiento que me regalo una carretera recta en un taxi con una mala canción de salsa puesta: De los sueños se despierta. Quizás por miedo, inseguridad, paranoia, inmadurez o tonterías, quizás porque nunca te despides correctamente o porque nunca dices “te quiero” lo suficiente. No lo sé.

    Quiero que todo este bien, cierro los ojos y es lo único que puedo repetir una y otra vez: quiero que todo este bien, quiero que todo este bien. Es rogarle al universo que siga sonriendo para mí (para nosotros) y que el olor de nuestras vidas siga siendo tolerable, oliendo a Kakao, a días lluviosos, a mar, a lo que queramos que huela.

    Son sentimientos, sueños, adquiridos y ajenos, ya no soy solo yo, porque todo lo que sientes parece pasar por mis venas (empatía probablemente incorrecta). ¿Tendré razón?

    I'll show you a god who falls asleep on the job
    The time has come to make things right
    You and I must fight to survive


    Buenas noches, los quiero a todos. Gracias Dios por permitirme respirar otro día más (un día en el que sí quiero hacerlo).

    jueves, julio 16, 2009

    Confesiones de 1/2 noche

    No te sueño de otra manera, no necesito cerrar los ojos e imaginar que eres diferente.


    En el mapa de tus ojos marrones puedo hallarme, el reflejo en ellos me engrandece. Cada una de tus formas de mirar despierta algo en mí: una mirada divertida dibuja una sonrisa, la mirada de niñit@ despierta una mirada de ternura, una mirada de ternura de tu parte hace que me resguarde en tus brazos- buscando salvación-, una mirada lasciva estimula el deseo, la mirada vergonzosa puede hacerme sonreír – nerviosamente, alegremente-.


    Todo en mí responde a tus gestos, todo lo que venga de ti causa resonancia. No busco simetría ni caos, la perfección es algo que no conoceré jamás; me agradan los claroscuros y saber que una línea es “recta” porque conozco una línea “torcida”.


    Tu sonrisa tiene la tendencia a iluminarlo todo, escucharte reír hace que mi cerebro piense que todo marcha bien, verte sonreír hace que mis ojos (mi mirada) también sonrían.


    Hay algo en tus labios, una especie de halo de gracia que los envuelve: la sensación de que con un simple roce puedo hacerme inmortal, de que con un beso puedo morir y volver a nacer en ellos. Tus labios son de la forma y del color de la provocación y el verbo que sale de ellos enloquece, tienta, es casi perfecto, humano y divino al mismo tiempo (di siempre palabras dulces para que no te sepan amargas al tragártelas).


    La forma en que tus colmillos se hincan en mi cuello y la forma en que se siente tu piel al contacto de mis dedos causa un efecto delirante.


    Es ese color mármoleamente blanco de tu cuello y su modo de enrojecerse cuando tiene contacto con mis mordiscos educados (mis besos), con los no tan educados y con mis manos recorriéndolo, dibujando figuras sin formas, el que despierta estas letras. Es el lunar del lado izquierdo que grita por ser rozado por mis labios, el espasmo de tu cuerpo cuando cede a mis caricias, el lóbulo de tu oreja y la suavidad de tu cabello, la forma en que muerdes tus labios…es esa experiencia inexplicable, innombrable.


    Tus manos se amoldan a mi cuerpo, saben transitarlo, reconocerlo. Tus brazos son mi lugar a salvo, me protegen y en tu pecho puedo dormir, soñar, volver a despertar y siempre sonreír.


    No eres diferente en mis sueños ni te imagino de otra manera, puedo tener cierta certeza de que la perfección se parece a esos hermosos amaneceres en medio de las montañas, a dormir bajo las estrellas, a una canción que marca tu vida; puedo tener cierta certeza de que la perfección se parece a un beso de buenos días y unas panquecas en algún lado.


    miércoles, junio 24, 2009

    Volumen, sentido, ascenso

    Tya se miro al espejo antes de salir, se quedo un rato disfrutando de la imagen imaginativa de su reflejo: una chica segura de sí misma, con un cuerpo estupendo, que usa cuero y tiene en su pantorrilla una daga escondida, esa chica que mueve las caderas y sonríe como los ángeles, esa chica que Tya no es.

    Al salir notó como el calor le quemaba los hombros (descubiertos) y también recordó que no se había peinado…Ya que importa…, pensó.

    Sumergida en su Ipod, la voz de Mat la guiaba por las bullosas calles de Caracas, la insistencia de “I’m feeling good” le hacía sonreír. Se imaginaba bailando por la ciudad desierta, cantando a todo pulmón, divirtiéndose como nunca. Al entrar al Centro Comercial se sintió aliviada, era un lugar anónimo dentro de la metrópolis, algo solitario, diferente, como ella. El ascensor escondía su esplendor detrás del cartelito de “Fuera de servicio”; ella sabía que esa noche tendría que usarlo, y esperaba ese momento con ansias: quizás la chica valiente saltaría del espejo y se apoderaría de ella, dejaría fluir todo lo que sus deseos esconden.

    Verlo implica lo de siempre: el pulso acelerado, los cambios de temperatura, el sonrojamiento, las ganas de saltarle encima como desde el primer día. El contacto con su piel quema, su mirada desnuda, expone sin miramientos, sus besos alienan, sus brazos protegen, su olor es como un pase de cocaína, the perfect drug. Todo en él produce adicción: el estar ante su presencia hace que el mundo se transforme en un caleidoscopio, él da energía, despierta las ganas, despierta lo inimaginable. Por él vale la pena aguantarse al mundo, por San, vale la pena ser.

    Sé que es un tema desgastado, que esta historia no tiene nada diferente a las anteriores; sé que ha sido contada con los mismos protagonistas pero bautizados de otra manera, sé que todo lo que sigue ya lo sabes. Sospecho que el mundo es un círculo que se cierra en el punto exacto donde acaba mi destino y empieza el tuyo, o el de San, o el de Tya, o el de cualquiera. Si continuaste leyendo hasta aquí, implica que algo más andas buscando, que aunque sepas que es la misma historia de siempre, hay algo que te obliga a continuar estas líneas (como a mi ese “algo” me instiga a escribirlas) y algo que hará que llegues al final de esto. No lo sé, detente cuando quieras. Detente ahora.

    San la esperaba en la puerta del teatro. Tya lo diviso desde lejos y empezó a sentirse nerviosa (nuevamente, como desde el primer día…), el vestido negro y su cabello ondularon a causa de una breve brisa y San pensó en lo hermosa que se veía. Se saludaron y entraron. El olor de San atravesó los sentidos de Tya, y la calidez de la piel de Tya hizo tambalear a San. Esa noche sería inolvidable, y ambos lo sentían.

    Las manos de San acariciaban la pierna de Tya, el vaivén de sus dedos sobre la ropa y la forma sutil de apretar el muslo hacían que la chica perdiera la concentración en la obra. El soliloquio de uno de los personajes se perdía, la voz del actor se mezclaba con el olor del perfume del chico; ese olor se introducía en los sentidos de Tya, los nublaban. El condenado olor hacía que quisiera besarlo, tocarlo tal y como San la tocaba a ella. La mano de Tya empezó a deslizarse por la pierna del chico, sus dedos empezaron a dibujar desfiguradas formas en la superficie del pantalón, las ganas de besarlo arremetían contra cada célula.

    Uno de los personajes de la obra citaba a Hamlet (“¡Oh, vergüenza! ¿Dónde está tu rubor?”), y Tya se preguntaba así misma eso: Vergüenza, ¿Dónde te has escondido?....

    La chica imaginativa del reflejo en el espejo había poseído su cuerpo: sus manos querían recorrer, explorar, sentir la blanca piel debajo de la ropa; sus labios querían encontrarse con los de San, extraer de ellos ese dulce veneno que la aniquilaba poco a poco, satisfacerse de sus besos (¿acaso es eso posible?). Otro personaje de la obra -un hombre trajeado de negro, con aires de supremacía y con espíritu empobrecido- decía:

    “Hay que curar los sentidos. El individuo se hace esclavo de su lujuria, pero ¿es qué acaso no todos somos pecadores debajo del cielo del Señor? Si esto es el infierno, a gusto soy maldito…”

    San quería abandonar el teatro, las manos juguetonas de la chica y esa forma de morderse los labios lo estaban enloqueciendo. La oscuridad, los juegos de luces, las voces lejanas de los actores y las caricias de Tya, se conjugaban para despertar en él las ganas de besarla y no detenerse, porque el cielo estaba sus labios y los besos de esa chica lo hacían inmortal. Ella es su gloria y su perdición, ella lo es todo.

    “La vida, mi estimado amigo, no se reduce a sueños o a dinero. La vida…es un circulo… una circunferencia... una esfera… algunas veces cerrada, otras abierta, pero siempre requiere de nuestra participación… con sus ángulos, áreas, curvas, volúmenes y superficies... La imagen inconclusa del universo, necesita de la mirada caleidoscópica para formar una imagen completa y, lo más importante, compleja. Una imagen que reúne al individuo y a todo lo que le rodea...”

    La obra había terminado. Tya, tomó la mano del chico y salió apresuradamente del teatro. Afuera, la prensa quería conversar con el escritor de “Semejante pieza maestra”, pero ambos hacedores huyeron hacia el ascensor. San tenía sus manos en la cintura de Tya, el ascensor se abrió de par en par, haciendo que el cartelito de “Fuera de servicio” se tambaleara y brillara en la negrura. Al entrar en el aparato, los besos se hicieron más apasionados: el cuello de San era víctima del instinto vampírico de Tya, mientras las manos del chico se aferraban a las piernas de la chica, levantando el vestido hasta el muslo y, en el espejo, la luz mortecina del ascensor hizo resplandecer la daga escondida.

    - Déjame meterme en tu piel cual droga ilegal (Tya)
    - Me matas…tus caricias son mi alimento, tus besos mi absolución (San)

    Al abrirse el ascensor nos encontramos todos. San y Tya, ambos sonrojados, atravesaron el salón circular hasta la recepción y pidieron su llave de habitación. Mientras, yo huía de la prensa y tú, leías esto.

    martes, mayo 19, 2009

    Ataque del perseguidor

    La mañana estaba clara, el cielo brillaba de azul y amenazaba con ser un día soleado… aún así sus ganas de estar se reducían a nada: el hecho de pensar en el calor, en los mismos lugares de siempre, en la misma cantidad de gente, en los rostros familiares, en el mismo discurso académico y en la misma rutina asfixiante, la enfermaba. La sombra del fracaso, su propio fantasma perseguidor, la envolvía cual capa de lluvia, había algo en ese día que la obligaba a querer renunciar, esa precisa sensación de frustración invadía cada célula y reducía todo a la palabra DESAPARECER.

    Había pensado en los últimos 20 minutos que le diría, quizás empezaría aclarando que tenía una idea fija en la mente, una que no abandonaría por nada; quizás simplemente le diría “Quiero huir” y colgaría el teléfono, buscando una llamada como respuesta, una más desesperada que la mía; quizás simplemente no debería llamar.
    Después de un viaje en metro, donde lo único que intentaba era controlar y asfixiar las lagrimas que amenazaban con salir y, desaparecer los malos pensamientos de mi mente, por fin llegué al único sitio que conozco dentro de esta puta ciudad en el que puede haber algo de silencio, un lugar donde todo se calla.
    Me eche en la grama y respiré, mientras dejaba salir todo lo que en un pésimo intento quise ahogar. A los minutos tome el teléfono:
    - ¡Hola! – quería salir de esto de una vez- ¿Recuerdas que te dije una vez que quería huir? – y mi voz se fue quebrando, un gran nudo en la garganta se fue formando y tuve que colgar (la voz ya no me salía). Él volvió a llamar, yo había optado por escribir un mensaje de texto, aunque mi grito desesperado se pudiese transformar (mediante ese medio) en algo impersonal; atendí.
    - Eh… continuando…- maldito nudo que no termina de desatarse o de asfixiarme por completo- ¿Recuerdas que dije que alguna vez quisiera huir?
    - Sí… – el pobre chico sonaba un poco confundido, quizás algo asustado- ¿Qué pasa?...
    - Bueno…- mi voz volvía a traicionarme (¡come on! Sé que puedo hacerlo, puedo terminar la frase)- … hoy es ese día. Estoy en el lugar donde el silencio es virtud. Tengo una idea inmovible… ¿Puedes y quieres venir?
    - Dame unos minutos y te veo allí- su voz segura me calmo, ya no tendría que estar sola en medio de esta situación que no lograba entender.
    Noas, mi ángel caído, vendría al rescate, vendría a iluminar las penumbras con su sonrisa.

    Al colgar, tres preguntas se repiten en mi mente: ¿Por qué llorar? ¿Por qué vivir? ¿Por qué dejar de hacerlo?...Solía ser un poco más sencillo… o ¿en realidad nunca lo fue?
    Las interrogantes cambian con la velocidad de la brisa: me pregunto cuál es la forma del perseguidor, a que huele o si puedo patearle hasta morir. No logro escuchar con claridad lo que dice, lo único que sé es que despierta esas ganas terribles de salir corriendo, de todos y de todo, sin razón aparente…Sólo huir, correr, desaparecer. Sin explicaciones, sin nada.
    Pienso en el escritor ocioso, la imagen del poeta que se sienta a esperar que el mundo pase, se me hace recurrente. No soy poeta, y es allí donde las contradicciones propias del mundo moderno entran. No soy poeta y eso duele, quizás esa revelación tan desagradable sea lo que el perseguidor está tratando de decirme, que sólo soy un cobarde que huye sin sentido de un mundo que le desconoce, al que le importa un bledo si sus letras son desesperadas o si siquiera tiene algo que decir…
    Noas apúrate, quiero dejar de sentir que cada átomo pesa.


    A Noas no le gustan los lunes. Es un idealista que puede levantarse sintiéndose suicida y acostarse esperanzado (o viceversa); suele creer en cambiar el mundo, le fastidian los relojes y la presión que trae consigo el tiempo, ama el olor a tierra mojada y el sonido de la lluvia, las tardes frías y los ocasos de cielo anaranjado, odia el calor. Noas es un chico condenadamente romántico, algo loco, que puede llegar a ser un idiota, quizás un poco solitario, inseguro, sarcástico, paranoico (¿acaso no lo somos todos?).

    Al fin llegó: existe algo en esa presencia que es irresistible, es el terrible encuentro con algo inexplicablemente hermoso, insoportablemente tentador, una presencia que puede regresarle la luz a un eclipse de sol (lo sé, hoy estoy particularmente romántica).
    La mirada de ese chico desarma: cuando sus ojos se enfocan en un punto y la sonrisa se le va dibujando en el rostro, todas tus defensas psicológicas y manías de no confiar en la gente se disuelven; cuando sus manos rozan tu mejilla y sus dedos utilizan tus brazos como camino hacia tu cuello, la sensación que despierta parece querer llevarse todo de por medio: es el condenado toque, roce, caricia, que parece arrastrarte a un mundo donde sólo hay dos, donde el comportamiento políticamente correcto se va al demonio, y la vergüenza y el pudor parecen cubrirse de colores, sí, suena como si fuese la mejor experiencia alucinógena (con una canción de Nine Inch Nails de fondo) que puedes tener, es un viaje fuera de este mundo y que sólo sucede con el toque de su piel, con su mirada, con su condenada sonrisa.

    El perseguidor se ha callado. Entre sus brazos he ahogado las últimas lágrimas de pesadumbre, la desesperación. Con un beso lo ha borrado todo, con su presencia sin pedir explicaciones, con su estar, ha regresado mis ganas de ser.
    El día termina en una montaña, en un maravilloso atardecer, donde vuelvo a pensar que algunos pensamientos se borran con el ocaso; donde sus brazos vuelven a darme esa seguridad inexplicable que me brindaron desde el primer día en que le conocí, donde puedo decir:…y ahora, llévame al horizonte.
    Sólo por esta noche, el perseguidor ha desaparecido.

    lunes, abril 27, 2009

    Recuento de una pesadilla

    Hoy me levanté y el mundo se sigue cayendo a pedazos: este condenado apocalipsis se está tardando demasiado. Las calles vacías, algunas esquinas congeladas y otras incendiándose, otro mendigo más acaba de ser desintegrado, lo sé, lo siento en el olor que queda… ¿dije mendigo? Quise decir político, sí, realmente apesta. En el centro de la ciudad un pedazo de cielo se ha caído, hay un hueco enorme en la atmósfera por donde las esperanzas se escapan. Hoy amanecí con ganas de decirle sí al mundo, a pesar de que no desperté a su lado, pero el condenado agujero se alimentó con mis ganas.

    No importa, hay que seguir rodando. Alguien me espera detrás de la puerta, en la casa con los vidrios cubiertos de hielo.

    En los centros comerciales, los televisores prendidos gritan el fin del mundo ¡Demonios, que se acabe de una vez! 

    Me pregunto cuántas personas en las esquinas de sus habitaciones habrán decidido enfrentarse al vacío con los ojos bien abiertos; cuántas estarán escondidas debajo de sus sotanas (detrás de sus pecados), rezándole a un Dios que no conocen; cuántos niños en las piernas de sus padres escuchándolos llorar deseando que todo acabe; cuántos ancianos habrán abusado de sus pastillas para dormir… Quizás todo esto ya pasó y sólo quedamos ella y yo, quizás sólo son nuestras sombras aferradas a un reflejo ilusorio de un mundo apocalíptico.

    Ya estoy por llegar, en la plaza un grupo de ciegos andrajosos se ríen a carcajadas, ellos (ahora) ven lo que quieren ver y sonríen, se alegran porque al fin pueden ver, no sólo observar. Del campanario de la iglesia un monaguillo se ha guindado, las campanas repiquetean y su cuerpo va y viene con el sonido, los ciegos siguen riéndose, sonriéndose unos a otros, sonriéndole al cielo.

    La acera está congelada, atrás se escucha un estrepitoso ruido, sin necesidad de voltear sé que es una adolescente triste que quiso volar, me pregunto sí sintió que lo hacía. Vuelve a oscurecerse el sol…otros cuerpos serán desintegrados.

    ...

    Llegué a la casa, al abrir la puerta ella estaba esperándome, su sonrisa lo ilumina todo,siempre lo ilumina todo.  La abrace y en ese momento, el cielo se tornó de un color rojo cobrizo, seguido por un estruendo que hizo parecer que se nos venía encima el firmamento... pero supe que todo estaba llegando a su final cuando sentí ese extraño, y aún familiar, sabor a oxido invadiendo mis papilas y mi olfato.

    ...

    Me pregunto cuándo comenzó todo, si fue ella hablando con su fantasma incorpóreo en un bar imaginario o fui yo hablando con mi reflejo en un baño. No importa, ahora sólo es un mal recuerdo.


    **El fragmento en cursivas es del colega Mr. GGD y también la foto utilizada para este post… ¡Antes de que me acusen de plagio! xP 



    Preguntas barrocas

    Cuando te decepcionas de tus semejantes ¿Qué es lo que queda?

    Humanidad, humanidad, humanidad… ¿Detrás de cual máscara te escondes?

    La realidad posee un peso inalterable, siempre es grave y absolutamente molesta. La muerte permea, está eternamente presente ¿el fingir evitará que me lastimen?

    La vida es un teatro. Representación tras representación ¿no nos perderemos dentro de tantas facetas?

    En el lado oscuro de la luna, en el otro lado del espejo, al lado contrario del camino, detrás de una puerta cerrada, dentro de una casa vacía ¿qué puedo encontrar? ¿lo que es o lo que parece ser?

    Me niego a parecer, ¡quiero proclamar inmediatamente lo que soy!

    No, no me gusta mentir, no quiero, no creo en eso, no traicionare mi filosofía por miedo, por no salir herida. Llámame masoquista si así lo quieres.

    En este mundo no hay cabida para los idealistas.